Rosquillas de Moscatel

 

Estas rosquillas quedan más ligeras porque en lugar de hacerse con la tradicional fritura se preparan en el horno. Además de las clásicas semillas de anís, se preparan con vino moscatel.

Ingredientes:

- 470 gr de harina

- 150 gr de azúcar

- 200 ml de aceite de oliva

- 150 ml de vino moscatel

- ½ limón

- ¼ cucharadita de semillas de anís

- 1 cucharada de semillas de sésamo

Preparación

Colocamos el aceite en una sartén pequeña junto con la cáscara de limón. Calentamos a fuego lento y, antes de que empiece a humear, apagamos el fuego y dejamos enfriar a temperatura ambiente sin retirar la piel de limón.

Tamizamos 450 g de harina sobre un cuenco. Vertemos el aceite aromatizado frío y removemos con una cuchara de madera. Añadimos el vino, 100 gr de azúcar, el sésamo y el anís en grano, y mezclamos bien.

Volcamos la masa obtenida sobre la mesa de trabajo ligeramente enharinada y la amasamos con las manos durante unos cinco minutos, hasta conseguir una pasta fina.

Precalentamos el horno a 200° C.

 Tomamos pequeñas porciones de la masa anterior y les damos forma de rosco (primero hacemos una bola y luego clavamos un dedo en el centro para hacer un agujero. Tiramos del agujero hacia fuera para agrandarlo, hasta lograr la forma de rosquilla).

Disponemos las rosquillas en la placa del horno, previamente forrada con papel vegetal, y las hornéamos unos 15 minutos, hasta que estén doradas. 

Pasado ese tiempo las retiramos del horno y las espolvoreamos enseguida con el azúcar restante. 

Las servirnos frías. 

*También se pueden espolvorear con un poco de azúcar glas.