Buñuelos rellenos con crema de queso

 

Hay multitud de variantes de los buñuelos rellenos por los países mediterráneos y América latina. Cada país o región, los elabora de una manera distinta y eso es lo más maravilloso de la cocina. 

Ingredientes:

para la crema de queso

- 500 ml de nata para montar crema de leche

- 350 gr de queso de untar

- 250 gr de azúcar

para los buñuelos

- 100 gr de harina

- 25 gr de mantequilla

- 5 gr de levadura en polvo 

- 3 gr de sal

- 125 ml de agua

- 2 huevos

- Unas gotas de esencia de vainilla

 Preparación

Comenzamos a hacer la crema de queso poniendo la nata en un bol con el azúcar y comenzamos a batir.

Con la nata ya montada, añadimos el queso crema y continuamos batiendo a baja velocidad hasta que se haya integrado perfectamente.

Luego tenemos que meterla a la nevera durante 4 ó 5 horas.

Ponemos un cazo al fuego con el agua, la sal y la mantequilla y esperaremos a que se derrita. Una vez lo haya hecho, agregaremos unas gotas de esencia de vainilla, removeremos un poco y esperaremos a que la mezcla empiece a hervir antes de retirar el cazo del fuego.

Esperamos a que se atempere un poco antes de añadir la harina y remover hasta que esté perfectamente integrada.

Ahora viene la parte más importante. Añadiremos los huevos de uno en uno, es decir, que no añadiremos el siguiente hasta que el anterior esté perfectamente integrado en la masa.

 Una vez tengamos todos los huevos bien mezclados, dejaremos reposar la masa durante unos minutos.

Con la masa hecha y el tiempo de reposo transcurrido, ponemos una sartén al fuego con aceite hasta la mitad de su altura. 

Cuando esté caliente iremos poniendo cucharaditas de la masa de los buñuelos y veréis cómo se van dorando e hinchando. Cuando se vayan dorando por un lado, les daremos la vuelta para que hagan lo mismo por el otro.

Según se vayan dorando por completo, los iremos sacando a un plato con un papel absorbente para quitar el exceso de grasa.

Ya solo queda embadurnarlos en azúcar cuando se hayan enfriando un poco y luego, cuando ya estén templados, llenaremos una manga pastelera con la crema de queso y los rellenaremos con cuidado de no hacerlo demasiado porque podrían reventar.

Servimos templados.