Combina el dulzor natural del plátano maduro con el intenso aroma del cacao puro, sin harinas refinadas ni complicaciones.
Ingredientes:
- 3 huevos
- 100 ml de aceite de girasol
- 60 g de miel
- 150 gr de harina integral de trigo o espelta
- 30 gr de cacao puro sin azúcar
- 1 sobre de levadura
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de canela
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Preparación
Precalentamos el horno a 180 °C, con calor arriba y abajo.
Engrasamos el molde con un poco de aceite o lo cubrimos con papel vegetal.
Pelamos los plátanos y los colocamos en un bol grande.
Los trituramos con un tenedor o batidora hasta conseguir un puré fino.
Añadimos al puré los huevos, el aceite, la miel y la vainilla .
Batimos con varillas o batidora hasta que quede una mezcla cremosa y homogénea.
En otro bol, mezclamos la harina integral, el cacao, la levadura, la canela y la sal. Los tamizamos para evitar grumos.
Añadimos esta mezcla seca al bol de líquidos poco a poco, mezclando con espátula y movimientos envolventes. Si deseamos, agregamos chips de chocolate, nueces picadas o avena.
Mezclamos suavemente para distribuirlos.
Vertemos la mezcla en el molde y alisamos la superficie.
Decoramos con rodajas finas de plátano o algunos chips de chocolate por encima.
Horneamos durante 45 minutos a 180 °C. A los 40 minutos, pinchamos con un palillo, si sale limpio o con algunas migas húmedas, está listo.
Si sale con masa cruda, dejamos 5 o 10 minutos más y controlamos cada pocos minutos.
Sacamos el bizcocho del horno y dejamos enfriar 10 minutos en el molde.
Luego, desmoldamos con cuidado y dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.
Una vez frío, lo guardamos en un recipiente hermético o lo envolvemos en film para mantener la humedad.
Espolvoreamos cacao o azúcar glas por encima antes de servir.
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