Las mejores cosas de la vida son los dulces

Los postres son frutas o platos dulces que se sirven después de las comidas. Para algunas personas la hora del postre forma parte del momento más atractivo de la comida, ya que suelen ser los platos más coloridos de la mesa. Además, son un acompañamiento en cualquier momento del día, son dulces y en algunos casos agridulces. Los postres han sido considerados el broche de oro de las comidas, cuando éste es de excelente calidad resalta la satisfacción de los alimentos anteriores.

Bizcocho chiffon



Este no es un bizcocho de limón cualquiera, el chiffon es una receta infalible cuyo resultado es extremadamente esponjoso y ligero.




Ingredientes:



- 225 gr de harina
- 7 huevos
- 3 yemas de huevo
- 300 gr de azúcar
- 110 ml de aceite de girasol
- 160 ml de agua
- 1 limón
- 16 gr de levadura química
- 5 ml de aroma de vainilla
- 1 pizca de sal




Preparación



Precalentamos el horno a 160º con calor arriba y abajo. Separamos las yemas y las claras de los huevos.

Ponemos en un bol la harina y el azúcar (reservamos 2 cucharadas de azúcar que usaremos después para montar las claras). Añadimos la levadura y la sal. Mezclamos con una cuchara.

Hacemos un hueco en el centro de la mezcla y echamos el aceite, todas las yemas, el agua, la vainilla, el zumo y la ralladura del limón. Batimos con varillas eléctricas hasta integrar todos los ingredientes. Reservamos.

En otro bol batimos las claras con el azúcar reservado hasta conseguir un merengue consistente.

Poco a poco añadimos el merengue a la preparación anterior. Usamos una espátula y mezclamos con movimientos suaves y envolventes para añadir aire a la masa y no perder la textura del merengue.

Forramos el fondo del molde con papel vegetal, podemos darle forma redonda con unas tijeras y hacer un agujero en el centro para el tubo. Engrasamos las paredes y el tubo con mantequilla o con spray para desmoldar bizcochos.

Vertemos la mezcla en el molde y horneamos 55-60 minutos. Cuando veamos que la parte superior empieza a dorarse cubrimos con papel de aluminio para que no se queme y seguimos horneando.

 Pasado el tiempo de cocción,  pinchamos con un cuchillo hasta el fondo, si sale sin masa pegada, el bizcocho está listo.

Sacamos el bizcocho del horno y le damos la vuelta para que se enfríe. Lo dejamos boca abajo durante una hora.

Transcurrida la hora desmoldamos con cuidado y quitamos el papel vegetal.

Antes de servirlo lo adornamos con azúcar glas y un poco de ralladura de limón.


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