Prueba estas increíbles galletas, rellenas de chocolate blanco y arándanos.
Ingredientes:
- 190 gr de harina
- 4 gr de bicarbonato sódico
- 3 gr de sal
- 230 gr de mantequilla sin sal
- 200 gr de azúcar moreno
- 100 gr de azúcar blanco
- 1 huevo a temperatura ambiente
- 1 yema a temperatura ambiente
- 1 cucharadita de vainilla
- 160 gr de avena
- 170 gr de chocolate blanco
- 120 gr de arándanos secos
Preparación
Lo primero que vamos a hacer será hidratar los arándanos. Así que en un recipiente colocamos estos frutos y le añadimos agua muy caliente hasta cubrirlos. Lo dejamos en remojo durante al menos media hora. Con esto lo que conseguimos es que se ablanden.
A continuación, en otro recipiente más grande vamos a tamizar la harina y el bicarbonato.
Ahora en otro recipiente limpio, ponemos los ingredientes húmedos: la mantequilla, el huevo, el aroma de vainilla, la ralladura de jengibre o limón y mezclamos con unas varillas hasta que quede todo bien integrado.
Y ahora empezamos a agregar ingredientes secos. Primero el azúcar moreno y mezclamos de nuevo. Luego el azúcar blanca, y volvemos a mezclar bien.
Es el momento de incorporar la harina con el bicarbonato tamizados. Mezclamos con energía. Y cuando esté todo bien integrado añadimos el resto de ingredientes.
Cuando tengamos los arándanos bien hidratados, vamos a colar y a quitarles el agua para secarlos bien con papel de cocina o paño limpio. Los añadimos a la masa.
También incorporamos los copos de avena y las perlas de chocolate blanco. Si no tienes pepitas puedes trocear una tableta de chocolate.
Mezclamos de nuevo hasta obtener una masa espesa y consistente. Y cuando tengamos la masa la puedes dejar reposar en el frigo durante una media hora o preparar las galletas directamente.
Con la ayuda de las manos haremos bolitas de masa y aplastaremos un poco para darle forma de galletas mientras precalentamos el horno a 180 grados.
Las pondremos en una bandeja de horno sobre papel vegetal y cuando el horno esté caliente horneamos nuestras galletas durante unos 10 o 12 minutos más o menos.
Esto dependerá de cada horno. Estarán listas cuando empiecen a coger color por los bordes.
Cuando estén listas las sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla antes de servirlas.
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