Esta receta es sumamente fácil de preparar, solo necesitarás una batidora para montar los huevos hasta obtener una consistencia cremosa, lo cual es la base para lograr la ligereza de la miga, a pesar de la densidad del aceite.
Ingredientes:
- 80 gr de aceite
- 140 gr de azúcar
- 2 huevos
- 140 gr de leche
- 6 gr de levadura en polvo
- 200 gr de harina
- esencia de vainilla
Preparación
Engrasamos un molde con un poco de aceite, colocamos una tira de papel manteca en la base y procedemos a enharinar.
Precalentamos el horno a 150 °C.
Para comenzar con la masa, colocamos los huevos en el bol de la batidora y añadimos el azúcar. Inmediatamente bate a máxima velocidad hasta que llegue a punto cinta o letra, es decir, después de 8 minutos levanta un poco de esta mezcla y déjala caer, los trazos deben permanecer por un par de segundos notoriamente.
Vertemos el aceite mientras vas mezclando a velocidad baja. Puedes utilizar el aceite que más te guste, aunque también puedes combinar diferentes aceites.
Seguidamente, incorporamos la leche, esencia de vainilla o ralladura de limón y continuamos mezclando a velocidad baja.
Aparte, tamizamos los ingredientes secos que son la harina y la levadura. Cambiamos a una espátula de goma para mezclar proporcionando movimientos envolventes.
Lo hacemos en tres tiempos hasta que obtengamos una masa homogénea.
Finalmente, volcamos la masa en el molde, esparcimos con una espátula la superficie porque es una masa ligeramente densa y horneamos por 45 minutos o hasta que introduzcas un palillo y salga sin residuos.
Cuando el bizcocho esté listo, retiramos del horno, dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Una vez frio desmoldamos y decoramos con azúcar en polvo.
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