Si buscas tartas sin horno fáciles que sean refrescantes, anota desde ya esta receta, porque está exquisita y tiene una presentación de 10 puntos.
Ingredientes:
- 1 paquete de bizcochos tipo soletillas
- 125 ml de leche
- 2 cucharadas soperas de Cointreau
- 2 hojas de gelatina
- 200 gr de queso crema tipo Philadelphia
- 175 gr de mermelada de frambuesa
- 150 ml de nata para montar
- 1 puñado de moras y frambuesas frescas
Preparación
Para preparar nuestro pastel de frambuesa y queso, vamos a pincelar los bizcochos de soletilla con la mezcla de la leche y el licor por una de las caras.
A continuación, forramos un molde de plum cake de 25 cm de largo y con capacidad para algo más de un litro con papel film trasparente.
Cubrimos el fondo del molde con las tiras de bizcocho empapadas dejando la parte mojada de leche y licor hacia arriba. Forramos también los laterales del molde con los bizcochos. Reservamos.
Ponemos a hidratar las dos hojas de gelatina en agua durante cinco minutos.
En un bol ponemos el queso crema y la mermelada de frambuesas. Batimos con la ayuda de una batidora eléctrica con varillas.
Escurrimos la gelatina y calentamos unos segundos en el microondas hasta que se haya licuado.
Vertemos en la crema de queso y la mermelada batidos y mezclamos con ayuda de una espátula.
Montamos la nata bien firme e incorporamos al queso crema con la mermelada de frambuesas. Mezclamos con movimientos envolventes hasta que esté bien integrada. Este será el relleno de nuestra tarta de queso Philadelphia y frambuesa.
Vertemos la crema en el molde que teníamos preparado de plum cake con los bizcochos.
Tapamos con más bizcochos pincelados con leche y licor.
Guardamos en el frigorífico hasta que nuestra tarta de queso y frambuesa sin horno cuaje, al menos, 4 horas.
Cuando ya esté cuajado el bizcocho de frambuesa y queso, desmoldamos en un plato rectangular y retiramos con cuidado el papel film.
Decoramos con frambuesas y moras frescas.
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