Descubre cómo hacer estas irresistibles tartaletas dulces, con una masa crujiente de avellanas y un relleno cremoso de chocolate.
Ingredientes:
- 160 gr de mantequilla
- 260 gr de harina
- 80 gr de azúcar
- 1 huevo
- 45 gr de avellanas crudas molidas
- 1 pizca de sal
- 200 gr de chocolate negro
- 200 ml de nata líquida
- 50 gr de avellanas peladas tostadas
- 200 gr de grosellas negras
Preparación
En un cuenco grande, mezclamos los 150 gr de mantequilla ablandada con la harina, el azúcar, las avellanas molidas, el huevo y la pizca de sal.
Amasamos bien todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea. Es importante que la masa quede suave, pero firme, para que sea fácil de trabajar.
Una vez que la masa esté lista, la envolvemos en papel film y la colocamos en la nevera durante 15 minutos.
Este reposo es crucial para que la masa se endurezca un poco, facilitando su estirado y evitando que se deforme al hornearse.
Pasados los 15 minutos, sacamos la masa de la nevera y la colocamos sobre una superficie plana. Con la ayuda de un rodillo, estiramos la masa hasta obtener un grosor de 5 mm. Con un cortador redondo, cortamos 8 discos ligeramente más grandes que los moldes de tartaletas que vayamos a usar.
Engrasamos ligeramente los moldes de tartaletas y forramos cada uno con un disco de masa. Nos aseguramos de presionar bien los bordes para que la masa se adhiera bien al molde. Luego, pinchamos la base de la masa con un tenedor para evitar que suba durante el horneado.
Precalentamos el horno a 180° C.
Colocamos las tartaletas en el horno y horneamos durante unos 18 minutos o hasta que la masa se dore ligeramente. Retiramos del horno y dejamos que se templen antes de desmoldarlas.
Mientras las tartaletas se enfrían, preparamos el relleno. Rallamos el chocolate negro y lo colocamos en un cuenco. En una cacerola, calentamos la nata líquida hasta que hierva, y luego la vertemos sobre el chocolate rallado. Removemos suavemente hasta que el chocolate se derrita completamente, formando una crema suave y brillante.
Colocamos las avellanas peladas y tostadas en el fondo de cada tartaleta. Luego, vertemos el chocolate fundido sobre las avellanas, llenando cada tartaleta con la mezcla cremosa. Al hacerlo, nos aseguramos de que el chocolate cubra bien las avellanas y quede nivelado en la parte superior.
Refrigeramos las tartaletas durante al menos 30 minutos, o hasta que la crema de chocolate se haya cuajado completamente.
Antes de servir, decoramos con las grosellas negras lavadas, colocándolas sobre el chocolate de manera uniforme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario