Tarta de Chocolate y Menta sin Horno

 

Una combinación irresistible de chocolate intenso y menta refrescante, en una tarta cremosa que no necesita horno. Fácil de preparar, elegante y perfecta para disfrutar bien fría en cualquier ocasión.

Ingredientes:

Para la base

- 200 gr de galletas de chocolate
- 80 gr de mantequilla derretida

 Para la crema de chocolate

- 200 gr de chocolate negro 
- 200 ml de nata para montar 
- 100 ml de leche entera
- 2 hojas de gelatina neutra (o 1 cucharadita de gelatina en polvo)
- 1 cucharada de azúcar 

 Para la capa de menta

- 250 gr de queso crema tipo Philadelphia
- 200 ml de nata para montar
- 80 g de azúcar glas
- 1 cucharadita de extracto de menta 
- Colorante verde menta 
- 3 hojas de gelatina neutra

- Virutas de chocolate para decorar 

Preparación

Trituramos las galletas hasta obtener un polvo fino.

Las mezclamos con la mantequilla derretida hasta que quede una textura arenosa y húmeda.

Forramos la base de un molde desmontable (unos 20–22 cm de diámetro) y presionamos bien con el dorso de una cuchara.

Guardamos en la nevera mientras preparamos las capas.

 Capa de chocolate

Hidratamos las hojas de gelatina en agua fría durante 5 minutos.

Calentamos la nata con la leche y el azúcar sin que llegue a hervir.

Añadimos el chocolate troceado y removemos hasta que se derrita completamente.

Incorporamos la gelatina escurrida y removemos hasta disolverla.

Dejamos templar unos minutos y vertemos sobre la base de galleta.

Llevamos al frigorífico durante 2 horas, hasta que esté cuajada.

 Capa de menta

Hidratamos las otras 3 hojas de gelatina.

Calentamos 2 cucharadas de nata sin hervir y disolvemos la gelatina escurrida en ella.

En un bol grande, batimos el queso crema con el azúcar glas y el extracto de menta.

Añadimos la gelatina disuelta, el resto de la nata montada y, unas gotas de colorante verde.

Mezclamos con movimientos suaves hasta obtener una crema homogénea.

Vertemos sobre la capa de chocolate ya firme y alisamos la superficie.

Guardamos en la nevera al menos 3 horas o toda la noche.

Adornamos con las virutas de chocolate antes de servirla.