Las mejores cosas de la vida son los dulces

Los postres son frutas o platos dulces que se sirven después de las comidas. Para algunas personas la hora del postre forma parte del momento más atractivo de la comida, ya que suelen ser los platos más coloridos de la mesa. Además, son un acompañamiento en cualquier momento del día, son dulces y en algunos casos agridulces. Los postres han sido considerados el broche de oro de las comidas, cuando éste es de excelente calidad resalta la satisfacción de los alimentos anteriores.

Tiramisú navideño

 


El tiramisú de Navidad es una versión festiva del postre italiano, preparada con crema mascarpone y café, pero enriquecida con sabores navideños como el turrón. 



Ingredientes:


- 500 gr de mascarpone 
- 4 huevos, yemas y claras separadas
- 100 gr de turrón blando
- 6 cucharadas de azúcar glas.
- 4 hojas de gelatina 
- 50 ml de leche.
- 150 ml de café solo.
- 50 ml de licor café gallego 
- Cacao en polvo.
- Un paquete de bizcochos de soletilla 



Para los arbolitos de chocolate

- 80 gr de chocolate negro
- azúcar glas




Para la decoración 

- 20 gr de turrón blando desmenuzado.
- Grosellas rojas.



Preparación




Forramos la base del molde con papel vegetal.

Mezclamos el café con el licor y reservamos.
Cascamos los huevos separando las claras de las yemas.

Batimos las yemas con el azúcar hasta conseguir que doblen el volumen o casi, es mejor que este paso lo hagas con unas varillas eléctricas que darán más aire a la mezcla. Reservamos.

Ponemos a hidratar las hojas de gelatina y agua durante al menos 5 minutos.

Calentamos ligeramente la leche y disolvemos en ella las hojas de gelatina escurridas. Reservamos.

En un cuenco aparte trituramos el queso y el turrón hasta que tenga una consistencia cremosa.

Añadimos la leche con la gelatina diluida en ella.

Añadimos poco a poco el queso a la mezcla de azúcar-yemas.

Montamos las claras a punto de nieve con unas varillas limpias y secas.

Incorporamos las claras montadas a la mezcla anterior con movimientos envolventes y suaves para mantener el aire de las claras montadas.

Cubrimos la base del molde con bizcochos de soletilla, ayudándonos de una cuchara sopera vamos mojando cada uno con la mezcla de café y licor. Deben quedar emborrachados del modo más uniforme posible.

Cubrimos ahora con una gruesa capa de crema de queso, otra de bizcochitos emborrachados, y la última de crema de queso.

Refrigeramos un mínimo de 6 horas.


Arbolitos de chocolate

Derretimos 80 gr de chocolate negro a baño María o en el microondas en fracciones de 30 segundos, revolviendo cada vez, hasta que esté totalmente derretido.

Elaboramos una manga con papel vegetal, se corta un triangulo y se le da forma de cucurucho, rellenamos con el chocolate y doblamos la parte superior para que no se desborde el chocolate y cortamos la puntita con la tijera.

Ponemos una hoja de papel vegetal sobre la encimera sujetada por un pegote de mantequilla en cada esquina a fin de evitar que se mueva.

Pintamos en el papel los arbolitos así nos resultará más fácil cubrir con chocolate y comenzamos a verter el chocolate sobre el dibujo.

Dejamos enfriar y despegamos suavemente. Para acelerar el proceso podemos guardar en la nevera.

Antes de colocar sobre la tarta, espolvoreamos azúcar glas para simular la nieve de la Navidad.

Pasaremos la tarta a una fuente de servir sujetando el papel vegetal. Una vez en la fuente de servir, nos ayudaremos de un cutter para cortar el papel sobrante y el que está justo debajo, lo dejaremos, no queda otra, la base está hecha con bizcochitos borrachos así que si tiramos del papel, no aguantarán.

Espolvoreamos cacao en polvo sobre la superficie, adornamos con un poquito de turrón desmenuzado y unas grosellas.

Colocamos los arbolitos alrededor del pastel, presionamos ligeramente para que queden pegados, manipulando con cuidado porque son muy frágiles.

Refrigeramos hasta el momento de servir.

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